Faúndez insta a los ayuntamientos a completar la documentación para los planes de prevención de incendios.
El presidente de la Diputación de Zamora, Javier Faúndez, ha instado a los ayuntamientos de la provincia a entregar con urgencia la documentación necesaria para culminar los planes locales de actuación contra incendios. Este paso resulta esencial para garantizar una respuesta rápida y coordinada frente a posibles emergencias forestales y urbanas.
Durante una rueda de prensa realizada en el Salón de Plenos de la institución provincial, Faúndez explicó que la colaboración entre la Diputación de Zamora, la Junta de Castilla y León y los técnicos de Medio Ambiente avanza con firmeza, pero aún depende del compromiso administrativo de cada municipio. En la reunión, también participó el delegado territorial de la Junta, Fernando Javier Prada Antón, quien destacó la necesidad de contar con planes actualizados que definan con precisión las zonas de riesgo, rutas de evacuación y recursos disponibles.
La Diputación ya ha enviado a todos los ayuntamientos los modelos de ordenanza contra incendios que deben aprobar en pleno. Sin embargo, el siguiente paso exige la presentación de documentación técnica esencial: planos de bocas de riego, mapas de fincas, y protocolos de evacuación. A pesar de la importancia de esta tarea, solo siete municipios han cumplido con los requisitos, lo que ha llevado a Faúndez a hacer un llamamiento a la responsabilidad y la rapidez administrativa.
Planes técnicos y dotación de personal especializado
Dentro del marco de prevención, la Diputación contratará un equipo de once profesionales especializados en gestión forestal, entre ellos un ingeniero superior, dos diplomados y ocho técnicos medios. Su objetivo será recorrer los más de quinientos municipios de la provincia, recopilando información detallada para la elaboración de los planes de prevención y guías de respuesta.
La inversión destinada a este proyecto asciende a tres millones de euros, gestionados a través de Somacyl, empresa pública de la Junta de Castilla y León, que asumirá las labores de desbroce perimetral, limpieza de fincas y mantenimiento de infraestructuras. Estos trabajos comenzarán tan pronto los municipios completen su documentación, con la meta de iniciar la ejecución a comienzos del próximo año.
Este refuerzo técnico busca no solo mejorar la capacidad de respuesta ante incendios, sino también fortalecer la planificación preventiva y la gestión del territorio.
La importancia de la bie 25 mm en los planes de protección
Uno de los puntos centrales de la estrategia es la actualización y mejora de las instalaciones hidráulicas de emergencia, donde destaca la relevancia de la bie 25 mm (boca de incendio equipada). Este tipo de equipamiento, presente en edificios públicos, naves industriales y zonas de riesgo, permite una intervención inmediata durante los primeros minutos de un fuego.
La Diputación pretende garantizar que todas las localidades dispongan de puntos de agua funcionales y señalizados, además de equipos de extinción operativos. El mantenimiento regular de las bie 25 mm y su correcta ubicación son factores determinantes para reducir el tiempo de reacción y evitar la propagación de incendios, tanto en entornos urbanos como rurales.
El plan provincial también contempla la instalación de bocas de riego cada 50 metros en los núcleos de población, complementadas con un inventario de las infraestructuras dañadas que requieran sustitución o reparación.
Refuerzo de medios técnicos y revisión de la BIE
La BIE, como herramienta esencial de protección activa contra incendios, será objeto de una revisión integral en todos los municipios de la provincia. Estos equipos, conectados a la red de abastecimiento de agua, ofrecen una respuesta inmediata en el lugar del incidente y resultan imprescindibles en zonas con alto riesgo forestal.
Además, la Diputación ha anunciado la compra de biotrituradoras, mochilas de extinción, batefuegos y dos nuevos buldózer, que se sumarán a las unidades ya operativas. Con estos recursos, se reforzarán las labores de limpieza, desbroce y mantenimiento de perímetros que rodean a las áreas pobladas, minimizando la posibilidad de que los incendios alcancen viviendas o infraestructuras sensibles.
Faúndez destacó que la combinación entre prevención técnica, equipamiento adecuado y formación será la clave para una respuesta eficaz ante emergencias, permitiendo además optimizar los recursos municipales.
Prevención y formación ante un incendio en hoteles y otras instalaciones públicas
Uno de los aspectos más destacados del nuevo plan de actuación es el programa de formación municipal que impartirán los bomberos provinciales. Este programa estará enfocado en la prevención y gestión de emergencias, incluyendo simulacros, mantenimiento de equipos y uso correcto de extintores y sistemas hidráulicos.
La preparación del personal cobra especial relevancia en espacios de gran afluencia, como centros educativos, hospitales, edificios administrativos y hoteles. Un incendio en hoteles, por ejemplo, puede tener consecuencias graves si el personal no está adecuadamente capacitado para actuar con rapidez y seguridad. Por ello, la capacitación incluirá el manejo de equipos de primera intervención, protocolos de evacuación y comunicación efectiva durante una emergencia.
El compromiso de los ayuntamientos, junto con la coordinación de la Diputación, permitirá que los municipios no solo cumplan con las normativas vigentes, sino que también estén preparados para responder de forma eficiente ante cualquier eventualidad.
Nuevas herramientas de planificación y colaboración institucional
El delegado territorial de la Junta, Fernando Javier Prada Antón, detalló las dos principales herramientas en desarrollo: la Guía de Respuesta ante Incendios Forestales y los Planes Locales de Actuación, ambos de carácter obligatorio.
La Guía de Respuesta ofrecerá un protocolo estandarizado que facilitará la coordinación entre las distintas administraciones y cuerpos de emergencia. En cambio, los Planes Locales de Actuación contendrán una descripción detallada del entorno urbano y forestal de cada municipio, las zonas de riesgo, los puntos críticos y las rutas de evacuación.
Se espera que ambas herramientas estén operativas a comienzos de 2026, lo que supondrá un avance decisivo en la protección integral de la provincia.
Marco legal y financiación para reforzar la prevención
El reciente decreto ley del 23 de octubre, aprobado por el Consejo de Gobierno de la Junta de Castilla y León, introduce mejoras sustanciales en el sistema de prevención y respuesta ante incendios. Entre las medidas más destacadas se incluyen ayudas del 100% para la adquisición de vehículos y material contra incendios, y subvenciones del 50% destinadas a la elaboración de estudios técnicos municipales.
Faúndez confía en que este marco normativo, unido al esfuerzo conjunto entre Diputación y Junta, obtenga el respaldo necesario en las Cortes de Castilla y León para su completa implementación.
Con estas acciones, la provincia se encamina hacia una mayor seguridad territorial y medioambiental, reforzando la capacidad de respuesta ante los incendios y protegiendo a la población y su entorno natural.
