Tragedia en San José: incendio en hotel con permisos al día deja cinco víctimas mortales: La seguridad y la prevención contra incendios, un tema urgente en los establecimientos turísticos.
Durante la madrugada de este jueves, un devastador incendio arrasó con parte del Hotel Oriental, ubicado en pleno centro de San José, Costa Rica. El siniestro, que dejó cinco personas fallecidas, consumió aproximadamente 500 metros cuadrados del tercer piso del edificio, situado en el distrito Merced, avenida 3, calle 8, muy cerca del Mercado Borbón.
Según confirmó la Municipalidad de San José, el establecimiento operaba con todos sus permisos al día desde el año 2016, y no se trataba de una cuartería, como se especuló en redes sociales. Sin embargo, el suceso ha puesto en el centro del debate la necesidad de reforzar las medidas de seguridad y prevención contra incendios en hoteles y edificios antiguos del casco central.
El trabajo del Cuerpo de Bomberos permitió controlar el fuego, pero la tragedia resalta una realidad preocupante: la falta de protocolos efectivos de evacuación y mantenimiento de equipos de emergencia en muchos establecimientos que reciben a huéspedes diariamente.
La revisión constante de extintores es clave para la seguridad hotelera
En todo establecimiento abierto al público, y especialmente en los hoteles, la correcta instalación y mantenimiento de los extintores es fundamental. Estos dispositivos representan la primera línea de defensa ante un conato de incendio. Sin embargo, no basta con tenerlos instalados; deben revisarse periódicamente, comprobar su carga y garantizar que estén ubicados en puntos visibles y de fácil acceso.
El Hotel Oriental contaba con sus permisos municipales al día, pero esto no siempre garantiza el cumplimiento de todas las exigencias técnicas de seguridad. Las autoridades deben ir más allá de los requisitos legales básicos y promover auditorías periódicas de equipos contra incendios. En muchos casos, un extintor descargado o mal ubicado puede ser la diferencia entre una emergencia controlada y una tragedia como la ocurrida en San José.
Además, el personal que labora en hoteles debe recibir formación continua en prevención y control de incendios, con énfasis en cómo identificar riesgos y cómo actuar en los primeros minutos, cuando aún es posible evitar pérdidas humanas.
El papel del extintor co2 en la prevención de incendios eléctricos
Entre los distintos tipos de equipos de protección, el extintor co2 ocupa un lugar esencial en los sistemas de seguridad de los hoteles, oficinas y establecimientos donde se utilizan equipos eléctricos. Este tipo de extintor utiliza dióxido de carbono comprimido para sofocar las llamas, desplazando el oxígeno del entorno inmediato y eliminando la fuente que alimenta el fuego.
Su ventaja principal radica en que no deja residuos ni daña equipos electrónicos, algo fundamental en lugares donde hay paneles eléctricos, sistemas de aire acondicionado, computadoras o ascensores. En instalaciones hoteleras, donde el consumo eléctrico es constante, contar con extintores co2 correctamente mantenidos puede evitar incendios de gran magnitud.
El uso adecuado de este tipo de extintor requiere entrenamiento. Es vital mantener una distancia segura, apuntar a la base de las llamas y no tocar la boquilla metálica durante la descarga, ya que alcanza temperaturas extremadamente bajas. Además, su eficacia depende del mantenimiento anual y de la revisión de presión interna, factores que garantizan que el equipo funcione correctamente en una emergencia.
El riesgo de incendio en hoteles y la importancia de la prevención
El incendio en hoteles es uno de los escenarios más peligrosos para cualquier sistema de emergencia, ya que involucra a decenas de personas, muchas de ellas durmiendo o sin conocimiento de las rutas de evacuación. Los hoteles deben contar con planes de emergencia claros, señalización luminosa, alarmas auditivas y sistemas automáticos de detección de humo y calor.
El fuego que consumió el tercer piso del Hotel Oriental demostró la velocidad con la que puede propagarse un incendio en una estructura de varios niveles, especialmente si los materiales no son ignífugos o si los sistemas de ventilación facilitan la expansión del humo. Los expertos señalan que la mayoría de las víctimas en incendios no mueren por las llamas, sino por la inhalación de gases tóxicos, lo que subraya la importancia de la evacuación rápida y ordenada.
Además, los edificios antiguos que se utilizan como hoteles deben ser sometidos a inspecciones estructurales y eléctricas periódicas, para detectar posibles fallos en cableado, sobrecargas o materiales inflamables. La inversión en seguridad es una obligación moral y legal para todo propietario o administrador de alojamiento.
Normativas y protocolos para garantizar la seguridad contra incendios
En Costa Rica, las normativas municipales y las disposiciones del Benemérito Cuerpo de Bomberos establecen los requerimientos mínimos de seguridad que deben cumplir los establecimientos comerciales, entre ellos los hoteles. No obstante, la realidad muestra que muchos negocios cumplen solo con los requisitos básicos sin implementar un sistema integral de protección contra incendios.
Un plan de prevención completo debe incluir:
- Extintores en todos los pisos y zonas comunes, correctamente señalizados.
- Sistemas de alarma interconectados que alerten simultáneamente a los ocupantes y a los bomberos.
- Salidas de emergencia amplias y sin obstrucciones.
- Capacitación regular del personal en evacuación, uso de extintores y primeros auxilios.
- Simulacros semestrales, que permitan evaluar tiempos de respuesta y coordinación.
El Hotel Oriental cumplía con los permisos administrativos, pero esta tragedia demuestra que los documentos no sustituyen la prevención práctica. La supervisión constante, el mantenimiento y la concienciación son pilares que deben reforzarse en toda la industria turística.
Conciencia y cultura de prevención: una necesidad inaplazable
En un país que recibe miles de turistas cada año, la seguridad hotelera debe ser una prioridad nacional. Los incendios, aunque poco frecuentes, tienen consecuencias devastadoras cuando la prevención se descuida. Invertir en sistemas modernos de detección y extinción, junto con protocolos de emergencia bien diseñados, no solo protege vidas, sino también la reputación y continuidad del negocio.
El sector turístico debe adoptar una cultura de seguridad activa, donde cada empleado sepa cómo actuar ante un incidente, desde el uso de un extintor co2 hasta la evacuación ordenada de huéspedes. Solo así se podrá reducir el riesgo de tragedias y garantizar la confianza de los visitantes.
El fuego no perdona errores ni descuidos. La diferencia entre una historia trágica y una emergencia controlada depende de la prevención, la formación y el compromiso de todos los actores involucrados.
