Tu técnico, tu éxito: cómo elegir al profesional adecuado para tu licencia

El paso que define tu negocio

Abrir un local es más que tener una buena idea. El camino hasta colgar el cartel de “abierto” está lleno de trámites, y uno de los más importantes es la redacción del proyecto técnico. Aquí entra en juego el “técnico competente”, una figura legal clave. Pero, ¿es lo mismo un ingeniero que un arquitecto o un técnico? Spoiler: no.

¿Qué hace realmente un técnico competente?

La legislación define al técnico competente como el profesional con la capacitación necesaria para firmar proyectos y asumir la responsabilidad del cumplimiento de la normativa. Pero ojo: “competente” no es lo mismo que “cualquiera con título”. Se trata de tener atribuciones para ese tipo concreto de actividad.

La licencia de actividad no es un trámite genérico

Solicitar una licencia de actividad implica justificar la viabilidad de un negocio desde el punto de vista técnico, normativo y medioambiental. Un error común es pensar que da igual quién redacte el proyecto, cuando en realidad cada actividad exige unos conocimientos específicos.

¿Qué pasa con la licencia de apertura?

La licencia de apertura es la comprobación final de que tu local cumple con los requisitos. Si el técnico no ha previsto algún detalle, como la ventilación en un bar o la insonorización en una academia de música, puede que el Ayuntamiento te pida modificar el proyecto o incluso suspender la actividad.

Inversión inteligente: cuánto pagar por el proyecto

Uno de los dilemas más habituales es el precio proyecto técnico para licencia de apertura. Aquí no se trata solo de cuánto pagas, sino de lo que recibes. Un técnico con experiencia ajusta el diseño, minimiza costes futuros y sabe qué documentación exacta pide cada ayuntamiento.

Ejemplo real: éxito gracias a una buena elección

En Málaga, una emprendedora que abría una tienda de alimentación ecológica eligió a un ingeniero agrícola que conocía a fondo los requisitos sanitarios. Su proyecto fue aprobado sin requerimientos y abrió en menos de un mes. La elección del técnico fue la mejor inversión de todo el negocio.

¿Cuándo elegir a un arquitecto?

Los arquitectos son imprescindibles si el local necesita obras de importancia: redistribución de espacios, cambios estructurales, modificaciones de fachada o accesibilidad. También son clave en negocios relacionados con hostelería o públicos masivos, donde el diseño y el cumplimiento normativo van de la mano.

Ingenieros: el perfil ideal para industrias

Naves, obradores, talleres o negocios con instalaciones técnicas complejas necesitan a un ingeniero industrial o especializado. Son los únicos habilitados para justificar ciertas instalaciones, como cuadros eléctricos, ventilación mecánica, cámaras frigoríficas o climatización industrial.

Técnicos para locales ya habilitados

Si el local está previamente acondicionado y el cambio es leve, un arquitecto técnico puede ser suficiente. Este perfil profesional está acostumbrado a trabajar con reformas menores, memorias técnicas, certificados de adecuación y documentación simplificada.

¿Por qué es vital su experiencia municipal?

Cada Ayuntamiento tiene sus manías administrativas. Un técnico con experiencia en tu ciudad o provincia sabrá cómo presentar el expediente, a qué oficina dirigirse y qué evitar para que no te lo devuelvan. Ese conocimiento es oro puro si quieres agilizar el proceso.

No todos valen, elige al que sí

En resumen: no todos los técnicos sirven para todo. La elección del profesional adecuado puede acelerar tu proyecto, evitar errores y garantizar una apertura tranquila. Si no tienes claro a quién necesitas, consulta con un equipo multidisciplinar que valore tu caso y te proponga la solución adecuada.